Viaje a Islandia

Día 3 Diamond beach, Fjallsárlón, Jökulsárlón (483 Km.)

(a 26 Km.) Jökulsárlón: Queremos empezar bien pronto con la visita a Jökulsárlón, una de las atracciones más impresionantes de Islandia. Se trata la laguna glaciar más grande y espectacular del país. Ubicada en la costa sureste de Islandia, Jökulsárlón se formó debido al retroceso del glaciar Breiðamerkurjökull, parte del vasto campo de hielo de Vatnajökull. La laguna está salpicada de icebergs que se desprenden del glaciar, creando un paisaje surrealista de formas y colores únicos. Los icebergs flotan serenamente en el agua turquesa, reflejando la luz del sol y ofreciendo una vista impresionante. Llegamos antes de que habran las taquillas de las diferentes empresas que ofrecen excursiones en barco entre los icebergs. El sol no ilumina todavía el hielo glaciar y disfrutamos del color azul intenso de alguno de sus hielos. Una vez abiertas las taquillas, contratamos una excursión en Glacier Lagoon Amphibian Boat Tours. Lamentablemente, no hay disponibilidad hasta las 11:10 AM. Aprovechamos el tiempo de espera para visitar la vecina Diamond Beach.

(a 1 Km.) Diamond Beach: La Diamond Beach, ubicada justo al otro lado de la carretera de la laguna glaciar de Jökulsárlón en la costa sureste de Islandia, es una maravilla natural conocida por sus impresionantes vistas y su escenario único. Esta playa de arena negra recibe su nombre por los numerosos icebergs que se desprenden del glaciar Breiðamerkurjökull y que flotan hacia el mar. Estos icebergs varados en la playa parecen diamantes brillantes esparcidos sobre la arena oscura, creando un espectáculo deslumbrante que atrae a visitantes de todo el mundo. La combinación de la arena negra, el agua turquesa y los icebergs blancos crea un contraste impresionante que deja a los espectadores maravillados. Además de su belleza visual, la Diamond Beach es un lugar ideal para observar la vida silvestre, con frecuentes avistamientos de focas jugando entre los icebergs o tomando el sol en la costa.

Regresamos a la hora acordada a Jökulsárlón, para iniciar el tour contratado con Glacier Lagoon Amphibian Boat Tours. Nos dicen que un grupo que debía compartir el tour con nosotros no se ha presentado y que no van a realizar la excursión sólo para nosotros. Nos ofrecen devolvernos el dinero o realizarlo tres horas más tarde. Quedamos totalmente decepcionados de esta empresa, que nos atendió muy mal. No podemos esperar tanto tiempo, pues nos quedan cerca de seis horas de coche hasta el lago Myvatn, donde tenemos contratado el siguiente alojamiento. Nuestra alternativa fue contratar una excursión en Zodiac con Ice Lagoon, empresa que nos trató de maravilla. Tenían disponibilidad para nosotros poco más de una hora después. Aprovechamos la hora de espera para visitar el cercano glaciar de Fjallsárlón.

(a 12 Km.) Fjallsárlón: Fjallsárlón es una laguna glaciar impresionante y menos conocida que su vecina más famosa, Jökulsárlón. Sin embargo, no carece en absoluto de belleza y majestuosidad. Al igual que Jökulsárlón, Fjallsárlón se formó debido al retroceso del glaciar Breiðamerkurjökull, una lengua del vasto campo de hielo de Vatnajökull. La laguna está rodeada por montañas y glaciares, creando un escenario impresionante y tranquilo. Lo que distingue a Fjallsárlón son los icebergs que flotan en sus aguas, muchos de los cuales son más grandes y tienen una forma más espectacular que los de Jökulsárlón. Además, Fjallsárlón ofrece la oportunidad de experimentar la belleza natural de Islandia con menos multitudes, lo que permite una experiencia más tranquila y contemplativa. La laguna, al ser de menor tamaño, permite contemplar de forma más cercana el frente del glaciar y todos sus detalles.

(a 11 Km.) Jökulsárlón: Nos embarcamos en la zodiac, destino al frente del glaciar, que está a unos ocho kilómetros al otro lado de la laguna. La duración de la excursión en lancha zodiac es de alrededor de unos 75 minutos. Pasamos entre icebergs, algunos de los cuales parecen esculturas. Tenemos la fortuna de disfrutar de un día totalmente soleado (en nuestra anterior visita la laguna estaba llena de niebla). La lancha zodiac pasa muy cerca del frente del glaciar vemos romperse un pequeño trozo (calving). La imagen del reflejo del hielo sobre el agua de la laguna es espectacular. La laguna es conocida por su vida silvestre, con focas que a menudo se pueden ver descansando sobre los icebergs o nadando en sus aguas. Nosotros tuvimos la ocasión de ver un par de focas encima de un par de témpanos de hielo, además de alguna más nadando.

Desde 1890, el glaciar Breiðamerkurjökull ha experimentado un retroceso, en total 5.6 km (3.5 mi) durante el siglo XX. Este retroceso se ha atribuido al aumento de las temperaturas entre 1920 y 1965. En 1933 o 1934, se formó un lago o laguna proglacial en la depresión dejada por el retroceso del glaciar, que desde entonces ha crecido en tamaño mientras el glaciar continúa retrocediendo. En 1975, la laguna Jökulsárlón tenía un área de aproximadamente 8 km2 (3.1 sq mi); para 1998, su área era de casi 15 km2 (5.8 sq mi); y para 2004, había crecido a 17.5 km2 (6.8 sq mi). Para 2010, la profundidad de la laguna era de aproximadamente 200 metros (660 ft) donde antes estaba la lengua del glaciar. Se han observado morrenas glaciares expuestas a ambos lados del agua.

Nos queda un largo camino hasta nuestro alojamiento. Recorremos el sureste de la isla de camino hacia Egilsstaðir. Cuando llegamos al cruce de la Ring road 1 con la carretera 95 tenemos que tomar una decisión. Antiguamente, la Ring road pasaba por la actual carretera 95, atravesando el paso de Breiðdalsheiði, a 470 metros de altura. Como esta carretera se cortaba frecuentemente por la nieve o niebla, en 2017 se trasladó la Ring road a la costa, con un trayecto mucho más largo. Como el día lucía despejado, decidimos continuar por la carretera 95. Ya de noche, llegamos a Egilsstaðir, donde repostamos y compramos provisiones en el supermercado Bonus, uno de los más económicos del país.

(a 433 Km.) Skútustadir: Debido a las horas perdidas por culpa de la compañía del bote anfibio, no tenemos tiempo de ir a ver la cascada Detifoss. Llegando por fin al lago Mývatn, nos encontramos con una furgoneta que llevaba a una familia de coreanos cruzada en medio de la carretera. Tras ayudarles a contactar con la asistencia en carretera de su compañía de alquiler, contemplamos nuestra primera aurora boreal, que era el objetivo de nuestro viaje. Estábamos muy emocionados, aunque en realidad la aurora no era demasiado espectacular, pues era de poca intensidad. Afortunadamente, las siguientes noches serían más intensas.